27.12.06

El amor y los kilos

Dado que mis alumnos de este año son muy aburridos y ya he contado los disparates más notables de otros cursos en dos posts anteriores, no me ha quedado más remedio que redactar un examen "diferente" para la convocatoria de diciembre con el fin de conseguir nuevos temas para este blog y de paso hacer la corrección más llevadera. Mi gozo en un pozo, bueno, más bien una de cal y otra de arena. Como se presentaron poquitos la corrección fue rápida, pero los dos ejercicios de los que esperaba sacar algo de chicha, se quedaron en nada. El primero de ellos porque, a pesar de ser más de lo mismo, sólo dos personas lo resolvieron y el segundo no les cogió por sorpresa tras el famoso problema de la cerveza.

El enunciado decía lo siguiente: Se ha observado que el peso, en kilos, que aumenta un profesor de la nuestra Universidad durante las navidades sigue una distribución normal de media 2kg y desviación típica 0.5kg. El marido de una profesora se queja del peso que ha ganado su mujer durante las vacaciones, 1.3 kilos. ¿Qué podría alegar ella en su defensa a la vista del resto de los profesores de la Universidad?

Antes de que alguien me tache de machista, "¿qué es eso de que tenga que excusarse por su peso?" completamente de acuerdo, he de decir en mi defensa que buscaba provocar, pero ni así…

La mayoría calculó el porcentaje de profesores que habían engordado más que la pobre mujer, un 92% de la plantilla, y con eso concluían que sus 1.3kg no eran nada. Pero un alumno llegó un poco más lejos. Tras calcular la probabilidad correctamente respondió:

Si el marido fuese profesor de la Universidad tendría una probabilidad del 92% de engordar más que su mujer, así que debe de quererla igual.

Si es que ya se sabe, cuanta más masa mejor se pasa. Deberíamos de aprender de los ingleses que a algo tan feo como los michelines lo llaman lovehandles, algo así como las "agarraderas del amor"...

3 comentarios:

Petete dijo...

"Lovehandles"...Ya no recordaba esta palabra. Y me encanta! Es de mis favoritas...Porque, ¿hay algo más amoroso que los michelines...? Y más en estas fechas, en las que los michelines afloran a cada minuto. Además el amor impregna las calles...Qué cursi me estoy haciendo, la verdad, pero es que es cierto,¿acaso es un tópico el que la gente esté más cariñosa en estas fechas?¿Y más gordita? A todos nuestros lectores, desde la vista gorda, FELICES FIESTAS!!!!

Tocotó dijo...

Es verdad y en nuestra ciudad han puesto unas luces que hace que parezca que las farolas sonríen...

Sí señora, en estas fiestas hay que ser cursi y ñoño. Así se hace. Muchos besos patito.

Anónimo dijo...

Qué buen ejemplo. Si es que los alumnos no se entretienen con nada. A mí me habría hecho gracia un problema como ése.