22.11.06

Chistes de economistas

No sólo vamos a reírnos de los matemáticos como Tocotó, sino también de los economistas como M Knight (Petete no se sabe bien qué es, así que mejor que ella misma se pronuncie). Quizá la visión más típica de los economistas es esta (al menos de los economistas que salen en los medios):
¿Por qué creó Dios a los economistas?
R: Para que los pronósticos del tiempo nos pareciesen buenos.

Los economistas han previsto 9 de las últimas 5 recesiones.

Cuando Albert Einstein murió, se encontró en la cola del cielo, ante las puertas de San Pedro, con tres gallegos. Para pasar el tiempo, preguntó cuáles eran sus coeficientes de inteligencia. El primero dijo 190. "Maravilloso, podremos discutir la contribución de Niels Böhr a la estructura del átomo y los efectos gravitatorios a nivel cuántico". El segundo respondió 150. "Podremos hablar del calentamiento del planeta y de la legislación necesaria para evitar el deterioro de la capa de ozono". El tercer gallego balbució 50. Einstein dudó un momento y luego añadió: "Bien, ¿cuál es su previsión para el déficit presupuestario el año que viene?"
Desde dentro es más habitual reírse de ciertos economistas que creen que la economía es una ciencia exacta en la que no hace falta molestarse en echar un vistazo a la realidad:
Para un economista, la vida real es un caso especial.

Un economista, un ingeniero y un químico naufragan en una isla desierta, muertos de hambre, y se encuentran una lata de sardinas, pero no disponen de abrelatas. Después de varios infructuosos ejercicios de ciencia aplicada por parte del ingeniero y del químico que intentan abrir la lata, ambos se volvieron irritados hacia el economista, que les había estado observando todo el tiempo con una sonrisita en los labios, y le preguntan:
- Pues bien, ¿qué haría usted?
A lo que el economista les respondió haciendo tranquilamente una exposición de su teoría, y que comenzaba:
- Bueno, supongamos que tenemos un abrelatas.
De todas formas, lo habitual es ver la economía como una ciencia que no vale para nada, porque no hay una sola verdad a la que agarrarse:
El primer día Dios creo el sol. De manera que el Demonio creó las tinieblas.
El segundo día Dios creó el sexo. En respuesta, el Demonio creó el matrimonio.
El tercer día Dios creó un economista. Esto fue un golpe para el Diablo; pero, al final, después de pensarlo mucho, creó un segundo economista.

El de la economía es el único campo en el que dos personas pueden obtener el premio Nobel por decir uno exactamente lo contrario del otro.

Es triste pensar en la cantidad de estudiantes de economía que han suspendido por no saber cosas que han resultado ser falsas.

Un economista vuelve al cabo de varios años a su universidad para dar una conferencia, y decide aprovechar para saludar a un antiguo profesor. Va a su despacho, y tras charlar un rato ve un examen sobre la mesa, así que lo coge, lo mira, y le dice al profesor:
- Oye, ¡pero si este examen es el mismo que nos pusiste a nosotros hace doce años!
- Sí. Tengo sólo tres exámenes, y los voy repitiendo cíclicamente.
- ¿Y no tienes miedo de que alguien lo descubra y lo copie?
- ¿Qué dices? ¿No ves que las respuestas cambian de año en año?
Y relacionado con esto, y para terminar, las dos Leyes de los Economistas:
Primera Ley de los Economistas: Para cada economista, existe uno igual y opuesto.

Segunda Ley de los Economistas: Los dos están equivocados.

7 comentarios:

Tocotó dijo...

He de decir que el chiste del abrelatas se parece sospechosamente al del matemático apagando el fuego en la papelera... Parece que no somos tan distintos ¿no? el frikismo nos alacanza a todos M Knight...

Además esto podría explicar las extrañas circunstancias de Petete a medio camino entre las dos disciplinas... y el hecho de que esté como una cabra.

Petete dijo...

En cuanto a mi posición a medio camino entre las dos disciplinas, muy pronto me pronunciaré mediante un post (de momento estoy intentando saber dónde estoy exactamente), pero quiero aclarar que el hecho de estar como una cabra es debido en gran medida a las influencias de mis compañeros bloggeros...(que no digo tampoco que no tengan nada que ver la economía y las matemáticas, eh...,pero la culpa no es del todo de ellas).

Anónimo dijo...

Querida Petete, no se olvide de la cita el próximo viernes a las 17:00.

Atentamente.
Dr. Garrido.
Psiquiatra.

Petete dijo...

Uy, pero cómo...? ¿No era usted la persona con la que ayer estuve hablando tanto tiempo?

Anónimo dijo...

No, estubiste hablando conmigo por lo de la chuleta que tenemos pendiente. Ciertamente, me se olvidó que dia es el examen.

Anónimo dijo...

De nuevo Petete, le recuerdo que me visite el próximo viernes, dados sus comentarios estoy seguro al 100% que el tratamiento no funciona adecuadamente y es necesario aumentar la dosis. Por favor, le ruego no falte a la cita.

Atentamente.
Dr. Garrido.
Psiquiatra

Moni dijo...

ja soy estudiante de economia en la universidad pero aprendo a reirme de lo q se dice de los economistas aveces creo q es la mejor carrera pero otras veces odio a los economistas jajaja es q solo "suponen" ja me encanto el chiste de los coeficientes!!!